martes, 3 de enero de 2012

PERO MORIRÍA POR TI.- Por Roberto Cantele(Sarco Lange)



te vi haciendo crucigramas
mientras yo me entretenía en obituarios

te vi salpicada de sangre
fastuosa, inmensa y hedionda a lluvia

te vi demasiado hermosa
cortando orquídeas
desde el esqueleto de mi antiguo jardín

(¿recuerdas cuando nos colgamos
del nogal y aquel niñito
se puso a llorar enloquecido?)

déjame marchar, por favor,
no me siento bien, más bien me siento
como el anti-héroe que nos salvó la vida

necesito marcharme
la marea ha subido
y los hombres rana
se han ahogado por falta de oxígeno
y exceso de diarrea

lupus, claveles y ron
años nuevos que llegan
años nuevos que serán nuevamente una masacre
la alternativa más irregular, débil e imperfecta
para continuar llorando
mientras hacemos fila
en los hermosos bancos de nuestra patria

te quiero, mi amor,
pero hoy no te necesito
no puedo sentirme enamorado
mientras el hijo de un dictador norcoreano
juega con sus botoncitos rojos
en la consola brutal de nuestras muertes

pero no todo está perdido
tus enormes ojos pardos
hacen que la acuarela de mi vida
más parezca
un vómito de judías y holocaustos

8 comentarios:

  1. Nadie como Roberto para crearnos una conmoción irreparable en las fibras más inexplicables del ser. No hay otro como él, y algún día... el mundo lo sabrá.

    Doy Fe.

    Marian Raméntol

    ResponderEliminar
  2. Sin duda alguna, hace tiempo que leo sus poemas y he solicitado su permiso para traerlos al blog y difundirlos.Incluso a mis amigas Chilenas se lo señalo, como quizá uno de los mejores, con ellas mismas, de Chile y a nivel mundial. Nadie como él ,esa es la frase...pero él continua en su modestia...
    Un abrazo Marian

    ResponderEliminar
  3. esa modestia es la humildad de los grandes...
    es grato ser amiga de tal escritor!
    un abrazo!

    ResponderEliminar
  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  6. Los seres grandes solo son susceptibles de medirse en grandeza de corazón. Roberto lo es absolutamente

    ResponderEliminar
  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  8. Sarco, un pródigo de la prosa roja.

    ResponderEliminar